martes, 29 de marzo de 2016

Recordando a Tommy Bolin

Paice, Hughes, Coverdale, Bolin y Lord

«Cuando miro las fotos de Tommy Bolin, ya no veo al último gran guitarrista de los años setenta. Más allá del mito y de la música, las guitarras y los discos, sólo veo a un joven de 25 años asustado y desorientado, viviendo por encima de sus posibilidades. Es entonces cuando siento una enorme compasión por él».

La historia de Thomas Richard Bolin (1951-1976), más conocido como Tommy Bolin, se truncó la madrugada del 4 de diciembre de 1976 en Miami, pocas horas después de que compartiera escenario con Jeff Beck.

Tommy Bolin comenzó a tocar la batería a los 13 años, instrumento que sustituyó finalmente por la guitarra, y los teclados. Tocó en diferentes bandas antes de ingresar en Zephyr, con quien fue telonero de Led Zeppelin. Después vinieron The James Gang y Deep Purple, y finalmente su carrera en solitario. Anteriormente había acompañado a Albert King durante un año. Billy Cobham también le reclamó en 1973, y Joe Walsh (Eagles) le recomendó para sustituirle en The James Gang, antes de que Bolin cumpliera los 23 años.

Tommy Bolin

Su primer álbum en solitario «Teaser» incluía a un grupo de músicos de estudio que muy pronto serían grandes estrellas: Jeff Porcaro, Jan Hammer, David Sanborn... Phil Collins, etc. «Teaser» fusionaba diferentes estilos y destacó de un modo notable, siendo un gran referente hasta nuestros días, siendo comercializado un mes después que «Come Taste The Band», álbum que Bolin grabó junto a Deep Purple, donde sustituyó al hábil guitarrista Ritchie Blackmore, que por aquel entonces acababa de formar Rainbow.


«Come Taste The Band» obtuvo una excelente crítica y un mal resultado de ventas. En 1975, Deep Purple inicia una prometedora gira que termina siendo un completo desastre. Bolin sufría una grave adicción a la heroína y Glenn Hughes a la cocaína. Tras numerosos problemas, Deep Purple se disuelve y Bolin forma su propia banda.

Su segundo álbum en solitario, «Private Eyes», se publica en septiembre de 1976. Contiene excelentes temas, a pesar del maltrecho estado del guitarrista, que es abandonado por su novia.

El 3 de diciembre de 1976 telonea a Jeff Beck en el Jai Alai de Miami. Después regresa al hotel, donde fallece por una sobredosis de diferentes drogas. La última canción que interpretó fue «Post Toastee», que precisamente alerta sobre los peligros de la heroína. Tenía 25 años y llevaba puesto un anillo de Jimi Hendrix que su ex novia le había conseguido.

Puede que nuestros músicos de hoy en día no posean su talento, pero al menos integran mejor sus vidas. Y eso ya es suficiente.

Atentamente:
Rafael Moriel

domingo, 6 de marzo de 2016

Beethoven: el Personaje Tenaz

Ludwig van Beethoven

El personaje de Beethoven, más allá de su música, fue creado a partir de ciento treinta y seis cuadernos que el genial artista dejó como legado a su ayudante, el músico Schindler. Él se encargó de trazar una imagen del compositor, destruyendo casi otros trescientos cuadernos que Beethoven utilizaba habitualmente para comunicarse y que asimismo incluían reflexiones musicales, diversas notas y apuntes, etc.


Beethoven era hijo de un padre alcohólico que lo maltrataba, obligándole a estudiar música. No fue un niño prodigio, pero a medida que se iba quedando sordo, y habida cuenta de que la evolución de los acontecimientos coincidía, a su vez, con diversos fracasos familiares y amorosos, fue regocijándose cada vez más en su música, hasta el punto de refugiarse completamente en ella, llegando a componer obras magistrales hasta el final de sus días.


La personalidad de Beethoven es un buen ejemplo de lo que en psicología se conoce como una personalidad tenaz («erre que erre»). A pesar de su sordera y de alguna que otra larga temporada sin producción musical, el músico continuó componiendo. Su legado final es sumamente generoso en todas las paletas conocidas, comenzando por el piano y terminando con la orquesta…


Beethoven fue un personaje muy sufrido. Caracterizado por terminar elevando el tono de sus obras musicales hasta límites insospechados, no hay lugar a dudas de que tenía un carácter temperamental, marcado e influenciado por la política de su época. Sin embargo y a pesar de todo, también puede atribuírsele la obra para piano que quizá posea menos agresividad de todas las que recuerdo, su magnífica e inspirada «Claro de Luna».




Descanse en paz el maestro Beethoven, que tras un largo número de enfermedades y complicaciones diversas, parece que falleció finalmente por un envenenamiento de plomo contenido en sus medicamentos.


Recomiendo, personalmente, visionar la película «Amor Inmortal», dirigida por Bernard Rose, y cuya trama gira alrededor de una carta que el malogrado artista dejó escrita tras su muerte, dirigida a su «amada inmortal».
La interpretación de Gary Oldman no te defraudará.




Atentamente:
Rafael Moriel